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Articulo del ABC

Los implantes dentales son una respuesta terapéutica oportuna para sustituir dientes perdidos; sin embargo, no todos son iguales ni ofrecen las mismas ventajas para todos los pacientes

 El tratamiento con implantes dentales es la base sobre la que se pueden asentar coronas o prótesis, ejerciendo las funciones de raíz del diente; puesto que están anclados en el hueso de los maxilares y rodeados por encía de manera similar a los dientes. Una vez que el paciente se ha decidido por este tipo de tratamiento implantológico, pueden surgirle dudas: ¿por qué hay diferencias tan notables en el presupuesto según el profesional que lo realice? ¿son todos los implantes iguales? o puede precisar más información sobre el tipo de implante que le van a poner.

 Evolución

La Implantología oral comenzó a desarrollarse tras el hallazgo del cirujano sueco Per-Ingvar Branemark, quien constató que el titanio reaccionaba con el hueso, creando una unión física lo suficientemente importante como para soportar las fuerzas que se ejercían sobre el hueso. Los primeros implantes de titanio eran pequeños tornillos que se enroscaban al hueso. Posteriormente, se diseñaron implantes de titanio no roscados, que se colocaban impactándolos en el hueso (como si fueran clavos). Con el tiempo, se evidenció que fracasaban a largo plazo, y hoy en día prácticamente sólo se colocan implantes roscados.

Eficaz y seguro


Hoy en día, la mayoría de los implantes dentales que se utilizan siguen siendo de titanio, si bien en los últimos años se ha ido mejorando la calidad y estabilidad a largo plazo de este tratamiento. Entre las principales modificaciones y mejoras introducidas en los últimos años, se ha variado la morfología y cualidades de los implantes; así, de tener originalmente una superficie lisa, ahora la mayoría presentan microrrugosidades que aumentan la superficie de contacto entre el hueso y el implante y, además, se les aplica un tratamiento de superficie que hace que la unión implante-hueso, además de física, sea química.

Según Pedro Lázaro, Máster en Periodoncia por la Universidad Complutense de Madrid, «las diferencias entre unos implantes y otros radican, fundamentalmente, en la superficie del implante (que influirá en su comportamiento biológico) y en la precisión del ajuste de sus componentes, lo que facilita el manejo clínico y el comportamiento mecánico de las prótesis».

Aval científico

Para desarrollar estos cambios y mejoras en los implantes, las empresas han realizado numerosos trabajos, estudios e investigaciones en colaboración con los dentistas. Estos estudios a largo plazo son los que diferencian a unos implantes de otros y los que dan al profesional y, por ende, al paciente las garantías de que la marca o el tipo de implante que se utiliza es o no fiable.

Aunque todos los implantes comercializados cumplen unos requisitos mínimos para su correcto funcionamiento, avalado por la marca CE, el resultado final a medio y largo del tratamiento con implantes dentales depende de muchos factores. Uno son los implantes en sí, pero también desempeña un papel trascendental el clínico que los coloca y el experto que realiza la prótesis, así como el propio paciente y su salud periodontal. Las empresas de referencia que desarrollan este tipo de implantes basan sus principios en afirmaciones comprobables y comprobadas; antes de comercializar un nuevo producto o una modificación en sus productos ya existentes, por pequeña que sea, realizan pruebas in vitro e in vivo para asegurar la calidad, eficacia y seguridad del producto. Sin duda, en el tratamiento con implantes dentales es cierto aquello de que lo barato al final sale caro.

Implantes sí, pero en encías sanas

El éxito de este tratamiento depende en gran medida de la fiabilidad de la encía que rodea al implante, que hay que cuidar mucho y bien. «Para realizar el tratamiento implantológico y obtener un resultado más predecible a lo largo del tiempo, es necesario llevarlo a cabo en una boca sin enfermedades de las encías», afirma Mariano Sanz, Catedrático de Periodoncia de la Facultad de Odontología de la Universidad Complutense de Madrid.

Los implantes requieren una atención y un cuidado adecuado y exhaustivo por parte del paciente. Como destaca Nuria Vallcorba, de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA), «las personas con implantes dentales requieren una atención y mantenimiento óptimos y regulares para prevenir la periimplantitis, que puede ocasionar la pérdida del implante por causas infeccioso-inflamatorias».

Para Alfonso Villa Vigil, Presidente del Consejo General de Dentistas de España, «la terapéutica de implantes es una opción eficaz, pero que se ha de ceñir a casos en los que no sea posible mantener el diente natural». Tal y como añade, «no supone un beneficio para el paciente la extracción de dientes naturales indiscriminadamente, sustituyéndolos por implantes con la idea de evitar el tratamiento periodontal y controles periódicos por parte del dentista, ya que los pacientes con implantes requieren también visitas periódicas de control».

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